La Misha Andina
Septiembre 26, 2020Dioses Aztecas
Octubre 22, 2020El estado venezolano de Lara resguarda enigmáticos tesoros en algunas de sus áridas tierras
En el centro-occidente de Venezuela, particularmente en el estado Lara, reposan interesantes vestigios que sobreviven como testimonio permanente de los pueblos aborígenes que habitaron esas tierras. Algunas de estas muestras de arte rupestre tienen más de dos milenios.
Es posible que antes de la escritura, tal y como la conocemos hoy, el hombre se haya valido de de primitivas formas gráficas para comunicarse, llevar registros de su actividad, contar acontecimientos importantes y legar su conocimiento a las generaciones siguientes.
Es así como llegamos a los petroglifos o arte rupestre, que consiste en representaciones artísticas talladas en piedra y cavernas, a través de símbolos que permitieron al hombre de la antigüedad expresar ideas, sentimientos, emociones y relatos de su cotidianidad.
El historiador venezolano Henry Montero lo expresa así en el blog Correo de Lara: “Son representaciones gráficas y simbólicas que expresan la cosmogonía o visión de las comunidades indígenas. Son expresión de una alta sensibilidad y ritualidad ancestral”.
Numerosos ejemplares de esta expresión artística han sido localizados en varias zonas del estado Lara. Entre los hallazgos se cuenta con los de municipios Urdaneta, Torres, Crespo y Jiménez. Los más numerosos son los localizados en Urdaneta hechos por indígenas ayamanes, a quienes también se les atribuye la creación de la danza agraria Las Turas.
Se trata de dibujos de diversos motivos labrados en piedras al aire libre y no en cuevas. Ello confirma su condición de hombre en contacto directo con la naturaleza a la que pretendía dominar con su inteligencia.
En estas embrionarias pinturas es manifiesto su cosmovisión del universo, dioses, ambiente inmediato, formas de ser, actividades diarias y relación con los otros hombres. Constituyen un espejo de su entonces limitado quehacer.
En la zona de Tumaque, municipio Crespo (al norte del estado Lara), se encuentra un llamativo petroglifo semejante a un rostro humano. “En apariencia son garabatos que rondan lo ingenuo. Pero guardan la profundidad de un ser humano sensible y pensante en la soledad y silencio de la virgen naturaleza donde se desenvolvía sin bordes territoriales cuando era un ser sedentario”, explica el investigador Freddy Torrealba, también para Correo de Lara.
Esta tierra árida y calurosa, particularmente hostil para el forastero pero poseedora de una riqueza cultural legendaria, fue habitada por los Ayamanes, los Xaguas y los Jiraharas (los tres pueblos son de familia lingüística arawak).
“Nuestros ancestros expresaban sus inquietudes a través de los petroglifos, las cuales contienen imágenes de su entorno natural y su visión mágico- religiosa: escenas de caza, animales, representaciones cósmicas y geométricas”, describe el historiador Montero, añadiendo que “los petroglifos de nuestra región se convierten en unos libros abiertos dignos de descifrar. Son unas piezas precolombinas llenas de mucha espiritualidad sagrada indígena”.
Este artículo contiene información del blog venezolano Correo de Lara, dirigido por el periodista e investigador Luis Perozo Padua, a cuyos autores y colaboradores agradecemos por la información facilitada y datos históricos sobre los petroglifos larenses.